Cientos de personas están detenidas en Indonesia por haber reclamado sus derechos sobre sus tierras, bosques y otros recursos, mientras resisten el desalojo y el acaparamiento de tierras. La realidad es que la Ley Forestal de Indonesia para la Prevención y Erradicación de la Destrucción del Bosque, aparentemente destinada a proteger los bosques de la delincuencia organizada y el maderero ilegal, se utiliza, en cambio, para criminalizar a Pueblos Indígenas y comunidades locales.