Chile: se intensifica el debate sobre las plantaciones de árboles

Imagen
WRM default image

Con el objetivo de mejorar su deteriorada imagen, el sector forestal chileno lanzó en agosto una multimillonaria campaña publicitaria --“Bosques para Chile”-- consistente en la difusión de propaganda en los medios de comunicación masivos, apuntando a convencer a la opinión pública sobre los beneficios de lo que llama “bosques” y que en realidad son monocultivos de árboles (ver Boletín 39 del WRM).

Las ONGs locales, que han estado luchando durante años contra ese modelo forestal destructivo, iniciaron de inmediato una contracampaña que obligó al sector forestal a reaccionar. En una carta publicada en el diario de circulación nacional “El Mercurio”, el Sr. Juan Correa Bulnes, Vicepresidente ejecutivo de CORMA, la poderosa organización de la industria de la celulosa y el papel, demostró su malestar criticando duramente un artículo de Malú Sierra, integrante de la ONG “Defensores del Bosque Chileno”. Según él, la afirmación del artículo de que las plantaciones no son bosques “es una muestra de ideologismo extremo que lleva a hacer afirmaciones que no tienen ningún respaldo científico y menos aún lógica".

En su respuesta, Malú Sierra destaca que en vez de insistir en que las plantaciones son bosques y gastar millones de dólares para mejorar su imagen, la industria maderera debería invertir ese dinero en realizar estudios ecológicos que demuestren lo que ya todo el mundo sabe: que los monocultivos de árboles producen impactos negativos. “Que las plantaciones no son bosques cualquiera puede saberlo; hasta un niño nota de inmediato la diferencia. Se puede torcer la verdad con imágenes sugestivas creadas por la mente de expertos publicistas, pero un bosque es un bosque y una plantación es una plantación", termina diciendo. Más claro, imposible.

Artículo basado en información obtenida de: Voces del Bosque, Defensores del Bosque Chileno, Primavera de 2000.