Celulosa y papel

Los monocultivos de árboles a gran escala para la producción de celulosa y papel, junto con la infraestructura y las fábricas de celulosa que conllevan, se han expandido sobre las tierras fértiles de las comunidades. Han destruido bosques y praderas, especialmente en América Latina, Asia y el sur de África. Las especies utilizadas no son nativas de estos países y son de rápido crecimiento, lo que implica un manejo intensivo con un consumo muy grande de agua y agrotóxicos. Incluyen variedades de eucalipto, acacia y pino.

Artículos del boletín 24 Octubre 2024
Además de sus impactos directos en la vida de las comunidades, los monocultivos de eucalipto representan una absurda y obscena desigualdad. Un grupo de 45 habitantes de las comunidades con quienes hablamos se quedaron atónitos al saber que tendrían que trabajar durante 2.300 años para recibir, colectivamente, lo que la familia para la que trabajan recibió en un año solo con los títulos de propiedad de una de sus fincas.
Artículos del boletín 25 Octubre 2023
Los intercambios entre activistas ponen al centro las voces de quienes luchan por la defensa de sus territorios. En setiembre, miembros de comunidades de Brasil y Mozambique conectaron sus luchas e historias una vez más, lo que contribuyó a fortalecer la solidaridad en la lucha contra las plantaciones industriales de árboles.
Artículos del boletín 16 Junio 2022
En Indonesia, más de 10 millones de hectáreas están controladas por la industria de la celulosa y el papel, principalmente por dos gigantes empresariales: APP y APRIL. A pesar de que sus compromisos para proteger bosques y turberas, ambas siguen vinculadas a la deforestación, los incendios forestales y a un modelo de negocios que conlleva violencia, así como la criminalización y el desalojo de las comunidades del bosque. (Disponible en indonesio).
Artículos del boletín 17 Diciembre 2021

Ante la promoción de los monocultivos de árboles como solución a la crisis climática familias afectadas por las plantaciones de árboles en Mozambique, Tanzania y Brasil denunciaron una vez más los graves impactos en sus vidas y en el medio ambiente.

Artículos del boletín 29 Enero 2007